¿CARAMBOLA O TESÓN?

 

 

 

 

 

 

 

Por: María de los Ángeles Saraiba Lavielle

Especial para Herencia Latina

La Habana - Cuba.

 

   Cantante de Pop y Rock, Augusto Enríquez sorprende con un traje nuevo: su disco Carambola. (1)

 

   Reza en algún diccionario que carambola es: lance de juego de billar en el que una bola atacada toca a las otras dos. En sentido figurado y familiar es doble juego que se consigue sin buscarlo: obtener algo por carambola. Otra acepción nos ofrece un sinónimo; casualidad.

 

    Pero al referirnos a su nuevo CD, Augusto Enríquez nos da otra definición:

 

   “...Carambola es el resultado de un bichito que a los artistas les pica alguna vez, que es el bichito de la investigación...”

  

   Y en una de las últimas ediciones del evento CUBADISCO el joven cantante se alzó con el Premio de Antología de versiones con su mambo Band CARAMBOLA, del sello Unicornio.

 

   Con su hablar fresco y seguro, Augusto nos cuenta:

    

     “A raíz de los sucesos que ha tenido el Buena Vista Social Club con un rejuvenecimiento, un renacimiento de la música que siempre nos ha enorgullecido a nosotros los cubanos me di cuenta de que existía un filón, un pedacito de época en que nuestra música floreció a nivel internacional y que después de haberla explotado en espectáculos y show, fundamentalmente, no se le ha dado la importancia discográfica o antropológica que necesita para poder “resalir” como lo que es, una de las más grandes manifestaciones de la música mundial de todos los tiempos. Esta es la música que se hizo entre los años 40 y 50, fundamentalmente,  que se empezó desde los 30. La música cubana hecha con Jazz Band Cubano, el cual toma como referencia a las bandas de ese tipo surgidas en los Estados Unidos a final de los años 20, principalmente 30 y 40, que es la época del florecimiento de los Jazz Band norteamericanos, y que Chao Pozo, junto con otros cubanos como Mario Bauzá, Miguelito Valdés, Machito (“2) y su hermana Graciela y otros, se encargó de convertir en el Jazz Band Cubano”.

 

   Conversar sobre música se convierte para Augusto Enríquez en un exquisito lance. De fácil palabra, ahora con el bagaje de una investigación que casi frisó el año, nos deleita con sus hallazgos:

 

   “...Para esta conversión sustituyeron la pro forma de batería que tenían aquellas orquestas americanas por tres sets de percusión cubana: el timbal, el bongó y cencerro y la tumbadora. Se quitaron los viento- madera, que no sonaban fuertes como los clarinetes y se hicieron otras sustituciones, y con ese formato se crearon ritmos como el Mambo, que lo inventó Dámaso Pérez Prado. También el bolero tomó de ese formato cubano todos los ingredientes que le permitieron convertirse en un género completamente internacional”

 

UN PASEO POR LA CAPITAL

 

      “Todo partió de un paseo por de La Lisa. Un día yo caminaba con un amigo por    ese municipio capitalino, veo una base de camiones y le comento algo a mi amigo y él me dice: mira aquello era Saint  Sousi. 

       Ese fue un cabaret muy notorio. Se inaugura finales de los años 30 y en los años 40 y  50 fue uno de los cabarets o centros de recreación más importantes de La Habana. Sin ser de los más lujosos era el que competía con Tropicana por el nivel de acceso que a él tenía la clase media. Tropicana siempre fue mucho más caro”

 

LA PICADA

 

      “Fue en ese momento que me vino la idea a la cabeza. Yo miré aquello y me dije: Bueno ¿Y qué pasó ahí? Y ya sabe, me picó el bichito aquel. Así surge la idea de mi disco Carambola. Empecé a investigar, a buscar música, muchas de las cuales eran muy conocidas aquí, incluso se interpretan en los cabarets todavía, pero ninguna con la fuerza que necesita la discografía para poderla relanzar, reproponerla. Para eso hay que hacer una investigación grande, porque si tú quieres proponer la música como originalmente es y que al mismo tiempo tenga la frescura de esta época, tienes que saber cuál era el formato de la orquesta, cuáles eran las características de los instrumentos de la época. Por lo tanto, llegué a la conclusión de que tenía que darme a la tarea de buscar todos los elementos de historia de la música y de meterlos en un disco  ¿Cómo hacerlo? , pensé...”

 

 

EN BUSCA DEL TESORO

 

   “...me fui a investigar con mi esposa, Yamile Scasanova,. Visitamos todas las provincias del país buscando a viejos músicos, partituras viejas. Fuimos a varias instituciones, al Museo de la Música, El Instituto de Investigación de la Música. Hablamos con la gente, recopilamos materiales. Esa fue una etapa muy linda, porque había personas que nos ofrecían un “cassetico”  viejo con una canción y así... Con la cooperación de Jorge Rodríguez, de la EGREM y de Sigfredo Ariel, dos pilares fundamentales en esta investigación,.

   Tras mucho bregar logramos recuperar 500 ó 600 temas que empezamos a escuchar. A partir de ahí, comenzamos a escoger las canciones, cuando ya estábamos situados en época”.

 

CON ZAPATOS DE DOS TONOS

 

       “Hacer un disco de esos géneros presupone para el investigador meterse en un personaje  como un actor lo hace cuando tiene ante sí un libreto. Y en este caso yo soy, además, el cantante y el productor. Tenía que ubicarme en los años de las década de los 50. Yo que soy un cantante que vengo del Pop y del Rock. Podrán imaginarse lo que significa para mí cantar este tipo de música. Fue un problema doblemente difícil poder transformarme en  un personaje de zapatos de dos tonos y traje de dril 100.

 

¿RESULTADO?

 

   Una labor ardua, inteligente y bien encaminada, nos regalan una excelente obra: el disco Carambola, que en 14 temas...

 

      “...resume o trata de resumir lo que sucedió en esa época en las orquestas de Jazz Band y los cantantes que hicieron de nuestra música cubana la gloria de esos años alrededor del mundo.

      El disco incluye temas de Pérez Prado, del Bárbaro del Ritmo, Beny Moré, de la orquesta Riverside y Tito Gómez, Temas de Vicentico Valdés con su orquesta, temas  de Machito y su orquesta, radicada en Nueva York desde los años 40, de Rolando Lasserie y otros más. Ahí yo trato de hacer un concentrado de piezas, algunas de ellas muy conocidas y otras casi desconocidas por completo, como el tema “Mientras exista el mambo”, el cual tocó Machito y cantó Graciela, su hermana, en el año 48, tomado de una grabación en vivo en Nueva York, y Carambola, que es una obra que muy pocos conocen, pero que son temas que aunque se crearon en Estados Unidos o en México fueron producidos por cubanos, quienes se llevaron de aquí la música, sus  tradiciones, su café, su tabaco y su ron y lo plantaron allí y fueron como los conquistadores musicales del  imperio”.

 

 

 

LA HISTORIA SE REPITE

 

      “Hay referencias de que tan fuerte fue el suceso, el éxito que tuvo la música cubana hecha con Jazz Band en los años 40 en los Estados Unidos, que durante uno de los gobiernos de la post guerra se hace un decreto ley prohibiendo que las orquestas cubanas de Jazz Band grabaran en los estudios norteamericanos, porque estaban haciéndole la competencia a las grandes JB estadounidenses. Es decir, eso es algo así como las primeras manifestaciones de bloqueo que tuvimos antes del bloqueo que tenemos ahora. Lo que indica que desde aquel momento nuestra música irrumpió en las más grandes plazas del mundo, porque llevaba  dentro una cosa que las demás no tenían. Por eso es importante evocar esa música, pero sin darle el tono de homenaje, porque se le da homenaje a algo que ya pasó, a una persona que ya murió y cuyas ideas quedan vivas. Creo que esa música está tan viva como nosotros, que está ahí, está en el aire. Mi trabajo fue sacar, desempolvarlas cosas que nunca se debieron haber empolvado. Y no me considero el descubridor ni mucho menos. Hay otros muchos compañeros que han hecho grandes investigaciones sobre esto y que han tratado también en ponerlas en discos, sobre todo en discos compactos.

 

   Yo me atreví, y digo que es un atrevimiento porque viniendo de mí, que no  soy un cantante conocido de salsa ni de música cubana, ni de son, me atreví a hacer este disco que espero que cuando lo escuchen les guste.

 

    

Augusto Enríquez

  

   ¿Qué tiene de particular este disco en cuanto a producción?

 

      “En Carambola la mayoría de los arreglos son los originales. En el estudio se grabó como se grababa en los años 50, con toda la orquesta, con el director delante, grabando al mismo tiempo,, con los micrófonos viejos, la reverberación física de la época, que yo me la inventé con una caja vieja de refrigerador, un bafle y un micrófono. Yo mismo inventé la maquinaria para poderlo hacer.  En realidad el trabajo fue muy bonito, primero el trabajo de investigación y después un trabajo casi de ciencia ficción, redescubriendo los atrasos técnicos.

 

¿Y el resultado de ese trabajo cómo te ha dejado a ti. Te  sientes satisfecho o consideras que pudo haber sido mejor?

     

      “No, yo me siento satisfecho realmente. Yo logré mucho más de lo que yo mismo esperaba. La realidad es que el resultado es maravilloso, yo estoy muy contento.

 

   ¿Entonces  tendremos la oportunidad de escuchar a Augusto Enríquez cantando bolero?

 

       “Sí. Y eso a las personas les va a extrañar mucho y eso también es parte de la magia del arte.

 

   ¿Y cómo te sientes cantando Mambo?

 

       “De lo más contento. Es que el mambo es muy rico. Para la persona que lo conoce es más una diversión que un trabajo en sí. Claro ¡Cuidado! Tienes que conocerlo, y para conocerlo te puedes pasar como me pasé yo, un año trabajando. Ya después tú lo conoces, que sabes cuál es la célula rítmica del mambo, que sabes como es el figurado de la melodía, cómo se respeta, dónde entra el instrumento y tú te tienes que callar...   porque hay una característica en este tipo de música. El cantante no es el cantante. El cantante es parte de la orquesta y se tiene que disputar con los tambores y con los saxofones el espacio que él  tiene justo para  cantar. Pero como ya te dije, me siento muy contento cantando mambo y estoy muy satisfecho del trabajo que hicimos todo el equipo. Estoy encantado con CARAMBOLA”.

 

Notas.

 

(1)  (1) Carambola: Tema musical de Chico O’farril, cantado por Machito, músico cubano de la primera mitad del siglo 20.

 

(2) Machito: Su nombre es Frank Grillo y nació en La Habana el 4 de diciembre de 1909. Según el musicólogo y ensayista Leonardo Acosta, a Machito puede considerársele el padre del Jazz Latino   y de la Salsa. (Revista Revolución y Cultura, mayo 1986). Machito era percusionista y director de orquesta popular, radicado en New York, en 1940 tenía su Afro-Cubana Jazz - Band.

 

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RECUADRO

 

Carambola, de Chico O’ farril

 

Yo quiero ganarte

de carambola

yo quiero ganarte, sí

yo quiero ganarte en esta

jugada yo quiero ganarte a ti.

a ti.

 

Yo te pongas ruda, mi nena

no me hagas romper el paño

no me hagas irme sin bola, no.

 

CORO

Te gané de carambola.

 

De Herencia Latina: Si desea leer más sobre está producción remítase a:

González, ElsidaCD CARAMBOLA: AUGUSTO ENRÍQUEZ Y SU MAMBO BAND.

http://www.lajiribilla.cu/paraimprimir/nro83/2254_83_imp.html

 

SUAREZ, Michel. ¿Carambola?

http://arch.cubaencuentro.com/musica/2002/07/15/8897.html

 

Fiallo, Jorge. "Augusto Enríquez y la bola que sube"

http://www.egrem.com.cu/disco_mes.asp

 

 

 

Edición Diciembre 2005 – Enero 2004

 

 

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