RESEÑAS

DICIEMBRE 2008 - ENERO 2009

 

Coordina Eric González (EEG)

 

"Meñique", Sonero Añejo.   "Salsa y Bembe". (Sonero Añejo Records)

 

Es muy grato para mí reseñar el más reciente trabajo del maestro Miguel A. Barcasnegras, conocido a nivel mundial como “Meñique”, un apelativo que prácticamente le borró su verdadero nombre y le remplazó para siempre —como Miguel A. Barcasnegras pasa de incógnito, inadvertido. Un sonero fino, de antaño, con una carrera profesional envidiable, —la misma que lo ha convertido en una especie de héroe, a la manera de un gladiador.

 

A su longeva edad mantiene intacto el timbre de su voz, sus ricos fraseos —uno los degusta, tal como la primera vez que lo escuchamos con la orquesta del maestro Tito Puente—, la dicción es perfecta y clara además que cuida su estilo. Muy bien lo expresa en su entrevista con Miguel Mosquera: «Yo me crié escuchando a Beny More y a Cascarita, pero también recibí una fuerte influencia de cantantes boricuas como Ismael Rivera y Cheo Feliciano del cual soy fanático. De Cheo me gusta la forma de pregonar y de Beny me gustaba su rapidez, así que lo que hice fue combinar estos dos estilos (Beny – Cheo) y forjar el mío propio, es por eso que mi estilo no es de Puerto Rico ni de Cuba es una combinación de los dos».

 

La carrera de Meñique es riquísima y basta, en efecto, se inició como cantante de la Sonora Panameña, orquesta bajo la dirección del maestro Guillermo Cantillo, posteriormente lo reclutan Raúl Ortiz y su Orquesta, La Orquesta Universal y La Perfecta del maestro Armado Boza, —la número uno en la década del 50. Pero su salto internacional lo dio con la banda del maestro Kako Bastar y fue para los Carnavales de Panamá del año de 1968. El cantante panameño Camilo Azuquita abandonó a Kako dejándolo a su propia suerte. Para resolver la situación, Kako empieza a buscar su reemplazo en la misma Panamá y fue la primera trompeta de Kako, el maestro dominicano, Rafael Lavastar, quien le dijo a Kako: «Kako llévate el quintín ese».

 

Ya en Nueva York, lo recluta el maestro Tito Puente, con Puente estuvo una corta temporada. Allí en la Gran Manzana conoció al Ciego Maravilloso, el maestro Arsenio Rodríguez. En su biografía comentada a Mosquera, Meñique lo afirma a su manera: «Una noche estaba con Tito en el Cabo Rojeño de Nueva York, entonces llegó El Gran Arsenio Rodríguez con Kike, su hermano y quien le guiaba todo el día por donde el necesitara desplazarse. Arsenio me oyó cantar y mando a Kike para que me dijera que el quería hablar conmigo. Después de terminar el set yo me acerqué a la mesa donde estaba Arsenio para hablar. Él me dijo que quería que hiciera un número en su próxima grabación. Yo no sabía que hacer pues yo estaba con Tito y no quería problemas, pero después de tanto insistir yo accedí a hacer la grabación la cual estaba programada para el día siguiente. El pacto con Arsenio fue te grabo un tema, me pagas y me voy».  Pero para beneficio de la historia, el Ciego Maravilloso rompió el pactó y convenció a Meñique para que le grabara tres temas.  Y así es la historia de nuestra música latina.

 

De Nueva York se enrumba a Puerto Rico con la orquesta de Willie Rosario, no obstante, hay que destacar que Meñique a cantado con las grandes figuras de la música latina: Charlie Palmieri, Eddie Palmieri, con el proyecto de Sergio George: Noches Calientes, con el Conjunto Chaney, con Santitos Colón, con muchos, la cuenta es inmensa, se pierde o se invierte a la manera Borgiana un "Libro de Arena".

 

Ha participado en los coros de sextetos, bandas y conjuntos como: El Sexteto de Joe Cuba, Tito Rodríguez, Celia Cruz, La Lupe, Zoraida, La Protesta de Tony Pabón, Tito Allen y Ray Barreto (coro con Héctor Lavoe en Indestructible). Ha realizado coros junto a los cantantes Héctor Lavoe, Vitín Avilés, Adalberto Santiago, Justo Betancourt, Santos Colon y Yayo El Indio. En fin Meñique es sensacional.

 

En su más reciente CD Meñique vuelve atractivo y esta vez como compositor, ya que todos los temas son de su autoría.  El CD es de calidad y para coleccionistas es placentero, dado a que este trabajo es un legado de un maestro que siempre esta pendiente  de sus seguidores además a la disposición de sus fanáticos. . .Y no es mentira,  este CD lo recibimos de parte de su esposa Epy, para la despedida que se le rindió a el "DJ Errante" Gary Domínguez en el Búhos Café en Piñones, Puerto Rico y allí estuvo Meñique despidiendo a Gary quien regresaba feliz, con su corazón latiendo a su Cali querido. ATAJAAAAAAAAAAAAAAAA.

 

Los temas del CD son:

 

1. Salsa y Bembe, 2. ¿Por Qué Llorar?, 3. Mi Muñequita De Carne Y Hueso , 4. Tortura De Amor , 5. Homenaje A Un Quijote , 6. Salsa Pa' Colombia , 7. Señor Don, 8. Sonero Añejo.

 

Acompañaron a Meñique:

 

Meñique, Voz y Dirección; Gino Picart, Jr. Piano, arreglista; Gino Picart  arreglista; Eddie Lebrón, piano, Eddie "Gua-Gua" Rivera, bajo, Steve Falmer, rompeta; Harry Rios, trombón, Bruce Nardi, saxofón; David González, percusión; Maria Rodríguez y Calixto Ferrer en los coros. (ISC)

 

Visite: http://elgranmenique.com/mitiendita.html y http://www.laconga.org/rm_menique.htm

 

 

The John Santos Quintet  “Perspectiva Fragmentada”  (Machete Records)

 

Voy al grano: “Perspectiva Fragmentada” es mi producción favorita del 2008, el cual ya está a punto de fenecer. John Santos es un tesoro del área de la bahía de San Francisco y para la música afrocaribeña en general. Este fabuloso álbum fue lanzado al mismo tiempo que “La Guerra No”, de John Santos y el Grupo Folklórico Kindembo, el cual reseñara en la edición pasada. Pero si “La Guerra No” recoge en su mayoría ritmos Yorubas, “Perspectiva Fragmentada” nos da un fascinante, colorido y apasionado recorrido en el territorio del jazz latino y otros ritmos afrocaribeños, que en su conjunto conocemos como salsa.

 

El compacto arranca bella y elegantemente con “Perspectiva Fragmentada”, un delicioso guaguancó, con la flauta angelical de John Calloway. Le siguen otro favoritos, “Campana La Luisa”, un número con ritmos variantes, donde predomina el son, bajo la voz de Willie Ludwig, y “Ritmático”, una vibrante descarga, donde se lucen dos viejos compañeros de los años en Nueva York: Orestes Vilató (timbales) y John “Dandy” Rodríguez (bongó) – éste último artista invitado. De mi predilección también son “Chiquita”, un académico danzón, con una curiosa melodía de piano, a cargo Marco Díaz, y el violín del experimentado de Anthony Blea; “Consejo”, una rumba, con Vilató dándole a la paila; “Dos esquinas”, un son montuno con sabor a joropo; y “México City Blues”, una soberana descarga de cueros.  Pero las gemas de la producción son “Israel y Arístides”, un elegante y emotivo danzón, posiblemente el mejor homenaje que se le ha brindado a dos genios de la música cubana -- Cachao y Tata Güines --, y “Mi Corazón Borincano”, una pieza que llega al corazón, dedicada a los padres de John Santos y los “timberos” de Puerto Rico, con mención especial a Cachete Maldonado. En este último número se luce “Pequeño” Johnny Rivero.

 

Es mucho lo que puedo decir sobre John Santos y la pureza de su música. Los que vivimos en California tenemos suerte de tenerlo aquí, siempre sirviendo como guardián de nuestro patrimonio musical. Adquiera “Perspectiva Fragmentada” y escucharán el corazón de un guerrero. (EEG)

 

 

Willie Colón & Rubén Blades  “Siembra: 30th Anniversary Edition”  (Fania/EMúsica)

 

Se dice que “Siembra” fue el álbum de “salsa” más vendido en su tiempo. Si eso es verdad, no lo sé, pero, si así fuese, justamente merece esa distinción. Este es un trabajo histórico por varios motivos, y llegó en un momento cuando el sello Fania necesitaba un segundo aire, y el “boom” de la salsa de los 70s iba de picada.  Para celebrar el aniversario 30 del lanzamiento de esta importante producción, EMúsica, los nuevos dueños del catalogo Fania, nos brindan una versión para coleccionistas, que de seguro traerá recuerdos de los que andábamos por este mundo en ese entonces.

 

“Siembra” abre con “Plástico”, uno de los números que nos hablaba de los “falsos valores” de aquellos tiempos, tomando como patrón a Tony Manero, interpretado por John Travolta en el filme “Saturday Night Fever”, el cual reflejaba la fiebre de “disco music” que reinaba en esos años.  El otro tema que va casado con “Plástico” es “Siembra”, donde Rubén Blades reitera que debemos de alejarnos de valores nocivos de otras culturas, y trabajar fuerte para que el mañana sea más próspero para todos, sobre todo los latinoamericanos. Estas dos son las piezas que le dan valor social al LP, y que pusieron a Blades como el vocero de nuestras penas en el mapa musical americano (el continente). Blades también explora otros aspectos de la condición humana en los números “Buscando Guayaba”, “Pedro Navaja”, “Dime”, y “Ojos”, este último escrito por Johnny Ortiz.  Entonces está “Maria Lionza”, un tributo a Venezuela, país que en ese tiempo era una meca de la salsa.  Además de incluir los temas originales, también nos presenta material adicional, como una versión de “Dime”, cuando estaba tomando forma, y la versión presentada como single. También se incluye “Ligia Elena”, a manera de merengue – así es, ¡Rubén Blades cantando merengue! Además tenemos una versión sin editar de “Pedro Navaja”, y una versión instrumental de “Plástico”, con coros, pero sin la voz.  

 

Debo concluir por mencionar que si “Siembra” marcó un record de ventas cuando vio la luz en 1978, esta nueva edición de aniversario rompe – al menos que esté equivocado – otro record: es el primer CD en la historia de la música de salsa que incluye versiones inéditas y material adicional de una producción. Además, el compacto consta de un librito que contiene toda la información pertinente sobre esta grabación. Todos estos factores, de por si, justifican la adquisición de este histórico trabajo de Willie Colón y Rubén Blades. (EEG)

 

 

Gerardo Rosales  “Salsa Mundial”  (Callejero Music Productions)

 

Hay artistas que hacen grabaciones, y la calidad de las mismas fluctúa, sin dejar una consistencia marcada. Existen otros, sin embargo, que comienzan bien, y siguen mejorando con el tiempo, tratando siempre de ser consistentes en su creatividad y originalidad. A este segundo, exclusivo y pequeño grupo pertenece el percusionista venezolano Gerardo Rosales, y su magnifica producción, “Salsa Mundial” así lo demuestra.

 

“Salsa Mundial”, corte que nombra el compacto, el cual nos presenta 16 piezas, abre poderosamente el mismo, con la voz del sonero Hermán Olivera marcando inmediatamente el territorio.  Este número sirve de presentación sobre el tema central de la grabación, pues en la misma se presenta talento y ritmos de diferentes países y culturas, combinándolos exitosamente con el sabor afrocaribeño. Así, por ejemplo, tenemos “Arepas”, salsa con sabor a joropo, cantado por Prisca Dávila; “Venezuela tiene candela”, otra salsa “joropeada”, con la voz de Rafael Pinto; “Silencio”, un lindo bolero con sabor a bachata, interpretado por Magda Méndes; “ledereen is van de Wereld”, con el talento vocal de Astrid “La Holandesa”; y “Salsa Bali”, que como su nombre lo indica, tiene elementos musicales de la isla indonesa. También se incluyen temas con mensajes relevantes a la industria discográfica, como “Merezco un Grammy”, cantado por Marcial Istúriz, con un coro profético que va: “Merezco un Grammy, aunque no viva en Miami”.  Mi gran favorita, sin embargo, es “Africa es mi Madre”, un bello son montuno que llega a lo más profundo del corazón, con el cantar de Yeci Ramos.

 

Debo decir que todavía estaba gozando de “Our Latin Groove”, la grabación previa a la que nos concierne de momento, y Gerardo nos dispara “Salsa Mundial”. ¿Con qué experimento aparecerá en su próximo trabajo?  Sea lo que sea, estoy seguro que va a ser tan bueno o mejor que “Salsa Mundial”. (EEG)

 

3D Ritmo de la Vida  “Que siga la Rumba”  (Gotham Music Group)

 

Dicen que lo difícil no es llegar, sino mantenerse. Y eso es lo que precisamente han hecho los muchachos de la orquesta 3D Ritmo de la Vida, bajo la hábil dirección del percusionista Michael Tate y el guitarrista Chris Aguilar. Si su primer álbum, titulado con el nombre del grupo, fue muy bueno, el que ahora reseñamos, “Que siga la Rumba”, es mucho mejor. Estos talentos van por el buen camino, con una identidad y sonido propios, que los separan del montón.

 

Trece son lo temas que nos presenta 3D en esta ocasión, abriendo elegante y sofisticadamente con “Mi Amor Eterno”, con la voz del sonero Hermán Olivera, donde escuchamos ese sabor único de la orquesta, destacándose la trompeta de Ray Vega. Disfruté igualmente de la sabrosa guaracha “Vete”, cantada por Willie Torres, el mismísimo de la Spanish Harlem Orchestra; “”Oyelo”, donde nuevamente nos canta Olivera, y Raúl Agraz brilla en los solos de trompeta; “Que siga la Rumba”, corte meloso que titula la producción, con el talento vocal de Olivera; y “En la Calle”, un número de Latin Jazz enérgico y con sabor. Cabe destacar que 3D es una orquesta muy versátil, y en este trabajo incluyen chachachás, reggae, reggaeton, y hasta bolero.

 

Lo he dicho muchas veces y lo vuelvo a repetir: sólo las mentes creativas e inventivas van a llevar nuestra música al otro nivel, manteniéndola viable para futuras generaciones. 3D tiene esa característica y el exquisito “Que siga la Rumba” es prueba de ello. (EEG)

 

Sol y Canto  “Cada Día un Regalo”  (MusicAmador)

 

Con quince años en la batalla, y cuatro grabaciones a su haber, el grupo Son y Canto regresa con una bella producción, “Cada Día un Regalo”, sin lugar a dudas una de las mejores del 2008. Cuan vino añejo, Sol y Canto, bajo el liderazgo del matrimonio actual y musical de Brian Amador (guitarras) y Rosi Amador (voz y bongó), sabe mejor con pasar el tiempo. “Cada Día un Regalo” es una delicia para el alma.

 

“Ojo por Ojo”, descrita como una rumba flamenca, arranca elegantemente el compacto, donde la voz de Rosi inmediatamente nos llega al corazón. Le sigue una nueva y sabrosa versión del clásico de Pedro Flores, “Obsesión”, a manera de son montuno / chachacha. Me llegaron al corazón también “Imagen de ti”, un exuberante huapango mexicano; “Credo”, pieza del folclor argentino; una nueva versión de la siempre conmovedora  “La llorona”; “Hasta la Luna”, tierno tema dedicado a las hijas de Brian y Rosi; “Beso Discreto”, un sabrosísimo son montuno de la pluma de Miguel Matamoros; y “Manifiesto”, otro número que nos toca las entrañas.

 

“Cada Día un Regalo” no sólo tiene buenos arreglos y buenas letras, sino que también le rinde homenaje a la música de nuestros países y nuestros autores. Existen grabaciones que lo hacen a uno sentirse bien y con emociones positivas. “Cada Día un Regalo” definitivamente es una de ellas. (EEG)

 

Ramsés Araya y Timbaleo  “En Vivo en Costa Rica”  (Producción propia)

 

Rubén Blades claramente dejó una huella profunda en Costa Rica. Músicos de alto talento de ese país, bajo el nombre de Editus, lo han acompañado en sus presentaciones alrededor del mundo en años recientes, al igual que la formidable orquesta Son de Tikizia. Uno de los percusionistas egresado de estas escuelas es el conguero Ramsés Araya, y con su grupo Timbaleo ha lanzado el flamante y explosivo “En Vivo en Costa Rica”, una grata sorpresa para quien escribe.

 

El CD está compuesto por catorce temas, donde Araya pone en práctica todo lo aprendido en su prestigiosa carrera, comenzando energéticamente con “Pa’ Kurubande yo voy”, donde se nos regala un regio solo de timbal y una respectiva moña. Otras piezas de mi predilección son “Te odio y te quiero”, corte romántico, pero netamente salsa dura; “Hasta cuándo”, con una contagiosa melodía; “Ponga atención caballero”, una potente guaracha; el vibrante “Hoy te he vuelto a esperar”; “Cosas Ticas”, emotivo guaguancó dedicado a Costa Rica; una nueva versión de “El Año nuevo / Pa’ fuera”; y “Te odio y te quiero/ Yo te voy a amar”, con la voz a de Rubén Blades, como invitado especial. Aquí Blades re-introduce al gran Medoro Madera. Cabe destacar que además de Blades, el popular David Bisbal también funge como artista invitado, interpretando “Amar es lo que quiero”. Otro que se destaca es Gustavo Díaz, cuyo cantar enriquece esta producción.

 

El debut de Ramsés Araya como líder de orquesta es impresionante, y ciertamente sorprenderá a muchos, como sucedió conmigo. Otra orquesta Tica bienvenida al mundo salsero. NOTA: Este CD sólo se puede bajar por Internet. Contactar a: www.ramsesaraya.com , www.myspace.com/ramsesaraya , o en USA: (714) 604-9384. (EEG)

 

 

Orchestra Harlow  “Salsa”  (Fania/EMúsica)

 

Existen grabaciones en la historia que marcan un precedente, porque ellas son tan creativas e influyentes, que crean tendencias y afectan generaciones. En la historia de la salsa, una de esas producciones es, sin lugar a dudas, una obra maestra que simplemente conocemos como “Salsa”, generada por Larry Harlow, con la voz de Junior González.

 

De las ocho piezas presentadas en esta grandiosa producción, “La Cartera” de la pluma de Arsenio Rodríguez, posiblemente es la más recordada. Este número Harlow lo grabó a manera de charanga con vientos, debido a que, como el propio pianista me dijera: “Tito Puente y Pupi Legaretta habían grabado “La Cartera” antes que yo lo hiciera, pero no fueron éxitos. Esta composición de Arsenio tenía una chispa que nadie pudo encontrar hasta que decidí usar violines, y volverlo en uno de los temas más memorables en la salsa de todos los tiempos”. Otros éxito de proporciones inimaginables fue “El Paso de Encarnación”, otra charanga.  Y, por supuesto, está mi gran favorita: “No hay Amigo”.

 

“Salsa” fue un álbum que pegó fuerte en Nueva York, y fue en parte responsable del renacimiento de la fiebre de charanga en esa ciudad. Harlow fue uno de los genios verdaderos por qué no llamarlo así, uno de los músicos más creativos que el poderoso sello Fania ha tenido y “Salsa”, entre otros trabajos, le aseguró al llamado Judío Maravilloso un sitio en la historia de la música afrocaribeña. (EEG)

 

 

Kip Hanrahan  “Coup de Tête”  (American Clavé)

 

Hace ya un rato que vengo diciendo que Kip Hanrahan es uno de los pocos genios que tiene la música en general estos tiempos. Y, cuando digo música en general, incluyo un buen porcentaje de presencia afrocaribeña en mi planteamiento. Mientras algunos músicos se mantienen con vida en nuestra querida salsa, tratándola de mantener fresca, Hanrahan ha experimentado nuevas formulas ya por un tiempo, y “Coup de Tête” (1981), su primera producción como líder, nos brinda un destello de lo que estaba por venir. Desde entonces, me he esforzado de que en mi colección no falte un trabajo de este gran innovador y visionario.

 

“Coup de Tête”  incluye nueve variados temas, donde claramente se puede escuchar  la diversidad rítmica de la música de Hanrahan, mucha de la cual es difícil de categorizar en un género especifico. Por ejemplo, “Whatever I want”, la pieza que abre el compacto, tiene un fondo a golpes de bata, donde se presenta un duelo de saxofones entre Byard Lancaster, Chico Freeman y George Cartwright. La percusión en este dinámico número está a cargo de Jerry González, Nicky Marrero, Daniel Ponce (cuando todavía posiblemente era bienvenido en Nueva York) y el propio Hanrahan. Entonces están mis favoritas: “India Song”, un arreglo jazzy y sensual, con el experimentado piano de Carla Bley -- quien canta el número en francés --, y el violín de Billy Bang; “A Lover Divides Time”, un Mozambique, donde a la percusión antes mencionada se le une Ignacio Berroa en la batería, y Arto Lindsay en la guitarra; y “No One gets to transcend anything (No one except oil company executives)”, un son montuno con gran tumbao de bajo, a cargo de Jamaaladeen Tacuma. El CD cierra con ‘Heart on my Sleeve”, una pieza de jazz, con un prominente acordeón, que de cierta manera termina la producción con un tono diferente al resto de los temas.

 

“Coup de Tête” por un tiempo era difícil de conseguir, tornándose en una pieza de coleccionistas. Pero, con la asociación de American Clavé con un  consorcio japonés, esta grabación ha encontrado una nueva vida y accesibilidad. Para felicidad de todos.  (EEG)

 

 

Chris Washburne and the Syotos Band “Land of Nod”  (JazzHeads)

 

Hace cinco años tuve el privilegio de ver “en vivo” a la poderosa orquesta de Ray Barretto – quién iba a pensar que por última vez --, y en esa ocasión, un joven alto, al quien no conocía, tocaba el trombón. Su nombre es Chris Washburne, y de verdad fue un placer conocerlo, porque, además de músico, es profesor de etnomusicología en la prestigiosa Columbia University. Cuando no está tocando salsa con diferentes orquestas, se le ve puede ver con Syotos, su grupo de jazz latino, con el que ha grabado cuatro deliciosos álbumes, siendo el suculento “Land of Nod” el más reciente de ellos.

 

Con un personal altamente conocido, como Chembo Corniel, Barry Olsen, John Walsh, Vince Cherico, y Bobby Sanabria como artista invitado, “Land of Nod” incluye nueve piezas con la mejor calidad de jazz afrocaribeño o latino, comenzando vibrantemente con “Pink”, con sabor a chachacha, destacándose Washburne con su trombón y Olsen en el piano. Otras favoritas son “Blue Gust”, un tema con sabor a cumbia, con un tumbao que me recordó al número “Ojos Chinos” del Gran Combo, donde saboreamos la trompeta de Walsh; “Op-Ed”, con sabor a rumba, donde brilla Washburne, y se nos brinda una soberana descarga de cueros; y “Peace”, un candente son montuno/guajira. Pero la obra maestra de la grabación – en mi humilde opinión – es “Gregory, don’t Go to the Village Dances”, un apasionado bolero que se transforma en un precioso son montuno, que lo deja a uno pidiendo más.

 

Chris Washburne entiende los ritmos afrocaribeños a la perfección, y es un artista cuya evolución es fascinante. “Land of Nod” es otro eslabón triunfal de esa evolución. Por cierto, recomiendo también el libro “Sounding Salsa”, escrito por Washburne, donde el autor examina en detalle la vida del músico en el Nueva York salsero. (EEG)

 

 

Fania All Stars  “Campeones”  (Fania/EMúsica)        

 

Dicen que las Estrellas de Fania (Fania All Stars -- FAS) es la orquesta de salsa más famosa de todos los tiempos. No sé si eso es cierto, pero lo que sí sé es que estuvieron en el lugar apropiado en el momento apropiado, y gracias al manejo astuto de Jerry Masucci y Johnny Pacheco – los entonces dueños del sello Fania –, su legado quedará para siempre en la historia. Ellos fueron el eje principal del movimiento salsero de los 70s el boom, que puso la salsa de Nueva York en el mundo entero. “Campeones” es una exquisita recopilación de la herencia musical que nos dejó este selecto y cambiante grupo de estrellas de la música afrocaribeña.

 

El CD doble contiene veinte canciones, y el mismo incluye algunos temas y éxitos, presentados en orden cronológico. Del álbum del concierto en el Red Garter (Vol 1), en 1968, tenemos “Me Gusta el Son”.  De los dos volúmenes del histórico concierto en el Cheetah”, el que puso  a la FAS en la brújula musical del mundo, se incluyen “Descarga Fania”, “Anacaona”, y “Quítate Tú” todos del volumen uno. Se presenta también una versión inédita de “El Ratón”, grabada en Puerto Rico en 1973.  Otros números incluidos de los álbumes que hicieron la FAS en vivo son “Mi Debilidad”, “Mi Gente”, “Hermandad Fania”, y “Bemba Colorá”, tomado del volumen 1 de “Live at the Yankee Stadium”. Además, la colección consta de una versión editada de “Juan Pachanga”, del álbum “Havana Jam”, y “Quítate la Mascara”, de la producción “Live in Puerto Rico”. Por supuesto, esta recopilación también cuenta con cortes que la FAS grabó en los estudios, como “Los Muchachos de Belén”, “Encántigo”, “El Rey de la Puntualidad”, “Cúcala”, entre otros. Aquí no se incluyen números  de estudio que la FAS hiciera con Columbia y demás.

 

 “Campeones” es una buena recopilación para seguir y estudiar la carrera de estos gigantes de la salsa. La misma consta de un librito con la historia de la FAS, y, en lo personal, los temas escogidos en su gran mayoría son los favoritos de quien esto escribe. (EEG)

 

 

Charlie Cajares  “Demente”  (Bacanos Inc)

 

Esta es otra grata sorpresa musical que tuve suerte llegara a mis manos. Charlie Cajares, talentoso cantante y percusionista colombiano, ha realizado una grabación de salsa de la mata, inteligente y con sabor. “Demente” es un compacto que debe satisfacer a los bailadores y amantes de la salsa dura por igual.

 

Compuesto por diez flamantes temas, el CD abre impresionante y llamativamente con “Quisiera ser Demente”. El jolgorio sigue con el igualmente sabroso “Mujer Ajena”. Pero, por mi dinero, me iría con “Porque yo te amo”, una nueva versión del clásico de Sandro, con un arreglo que se cocina lentamente; “Lo que dice Yusty”, con un colorido solo de timbales por el propio Cajares; “Caso Familiar”, con un sabrosísimo piano por Lucho Cueto; “Nos volvimos a encontrar”, donde Ricky González inyecta un rico tumbao con su  piano; y el sabor agresivo de “Cuando quiero llorar no lloro”.

 

Charlie Cajares  es un artista completo, con una buena voz, y capacidad de sonear, así como también un  buen timbalero. Con otros conocidos músicos que participaron en esta producción, como Rubén Rodríguez, Richie Viruet, Luisito Quintero, Erick Velez, Ray Colón, Ozzie Meléndez, entre otros, Cajares ha realizado una grabación que nos dice que está aquí para quedarse. (EEG)

 

Francis Ndoumbe  “Soy Africaribe”  (Tamba Music Productions)

 

La salsa africana tiene un sabor especial, pocas veces agresiva, pero muy placentera y rica en sabor. Esto es lo que precisamente sentí al escuchar “Soy Africaribe”, una pequeña joya del cantante Francis “Soy Africaribe”, originario de Camerún. Esta es una producción refrescante, cuan brisa tropical en una noche de verano.

 

De esa manera, pues, Ndoumbe empieza con el tema “Soy”, donde inmediatamente palpamos e identificamos la personalidad colorida de la música del cantante africano, quien tiene una voz frágil, suave, tierna y sincera, que hace fluir las melodías sin esfuerzo. La fiesta sigue con los guaguancós “La Francesa”, “Los Años”, “Fuego”, y “Mi Barrio”, este último cerrando el compacto. Disfruté sobretodo con “Amor perdido”, una guajira que cambia a guaguancó, y “Cada vida”, un chachacha lento que evoluciona en una suculenta guaracha.

 

El colorido especial de “Soy Africaribe” se debe, indiscutiblemente, a la presencia marcada de las guitarras, y el uso restringido, pero efectivo de las trompetas, que de momento tienen un sonido matancero. A esto hay que añadir la voz de Ndoumbe, y se completa la fórmula.  Esta es una de esas grabaciones raras, con la cuales se puede bailar, o amenizar una noche divertida con las amistades, con el sabor añejo del son cubano. (EEG)

 

 

Rubén Blades con la Orquesta de Pete Rodríguez  “De Panamá a New York”  (Fania/EMúsica)

 

“De Panamá a New York” es un álbum que de momentos me frustra, porque fue un trabajo bien logrado diferente, adelantado a los tiempos, como dicen, pero, porque parece ser no vendió, fue tirado al olvido.  Esta grabación debió ser la entrada triunfal de Rubén Blades a “la salsa de Nueva York”, pero no fue así. De todas formas el hombre plantó su semilla, y, como a veces hay justicia en este mundo, pudo conquistar la Gran Manzana unos años más tarde

 

El clásico “Juan González” abre el compacto, y allí nos damos cuenta inmediatamente del talento de Blades y entenderemos la fuerza que iba a ser en el futuro. Este es un canto a un guerrillero, moldado por el mítico Che Guevara (aunque Blades se dice lo ha negado), quien fuese asesinado en Bolivia poco antes de la grabación. Otra clásica es “Descarga Caliente”, tema al parecer más popular del álbum estos tiempos, donde disfrutamos de una extendida moña, bajo el poderoso acompañamiento de la orquesta de Pete Rodríguez, quien con su piano le dio saoco a los arreglos. Aquí también se destaca Jimmy Sabater con un solo académico de timbal. También está el número que titula al álbum, “De Panamá a New York”, escrita por nuestro respetado amigo y músico, el Dr. Roberto Cedeño. Otras piezas meritorias en este histórico trabajo son “El Bravo,” “Hey Man,” y “El Pescador”.

 

“De Panamá a New York” es un compacto para coleccionistas, que no sólo representa una producción temprana del panameño más conocido en la historia de la salsa, sino que también representa una cápsula histórica de esos años turbulentos.  Sería interesante si EMúsica – lo nuevos dueños de Fania – pudiesen encontrar y rescatar la grabación que Blades hizo en Panamá, con el acompañamiento de Bush y sus Magníficos, que Pancho Cristal produjera, llevándose los masters para Nueva York  (EEG)

 

 

Fela Ransone Kuti  “Lagos Baby 1963-1969”  (Vampisoul)

 

Fela Kuti  (1938-1997) ciertamente es un icono en la música africana y mundial. Padre del llamado ¡Afro-Beat!, muchos lo recordamos por sus grabaciones realizadas bajo el nombre Fela-Anikulapo Kuti, el cual adoptó en 1970, donde la mayoría de los temas en sus grabaciones sobrepasan los diez minutos, y no es raro encontrar algunos LPs con sólo dos maratónicos números. Esos eran años turbulentos para el músico, donde, uniéndose al movimiento Black Panther en los Estados Unidos, creó su propia comuna la Kalakuta Republic, la cual declaró independiente de su natal Nigeria. Igualmente inició su propio partido político, “El Movimiento del Pueblo”, donde prácticamente le declaró la guerra al gobierno de su país, movida que le sería dañina por el resto de sus días. Todo eso lo reflejó en su música, volátil y poderosa.

 

Sin embargo, “Lagos Baby 1963-1969” nos muestra otro lado del artista, cuando su nombre era Fela Ransone Kuti, en vez de Anikulapo. Esta maravillosa colección recoge el trabajo de Kuti antes de la creación del ¡Afro-Beat!, y sus grupos Africa 70 y Egypt 80. Lo que aquí escuchamos son las producciones realizadas entre 1963 y 1969, con el grupo The Koola Lobitos, donde Kuti estaba influenciado por el Laitn Soul, Calypso, Funk, soul, jazz y otros ritmos, todos lentamente engendrando lo que en el futro sería el ¡Afro-Beat!. Durante esa época, también, los números eran cortos en duración. De esa manera, pues, esta importante colección nos presenta dos CDs. El primero, que consta de 22 temas, cubre desde 1963 hasta 1965. Por otro lado, el segundo incluye 17 números grabados entre 1966 y 1969. Entre los cortes que podríamos llamar Calypso, tenemos, por ejemplo, “Bonfu”, “Fere”, “Oyejo”, “Oloruka”, y “Egbin”; y entre los Soul están “VC 7” y “Everyday I got my Blues”. Por otro lado,  la influencia cubana se escucha claramente, por ejemplo,  en “Great Kids”, “Orise”, Awo”, y “Lai se”. Debo destacar que la clave cubana de siente fuertemente en algunos de los temas. Para cerrar, me atrevería a decir que los principios marcados del ¡Afro-Beat! lo podemos escuchar en “”Mi o mo”, “Moti Gbrokan”, “Waka Waka”, y “Ako”.

 

“Lagos Baby 1963-1969” es una producción importante para cualquier amante de los ritmos afrocaribeños. Muchos de los temas aquí incluidos son difíciles de conseguir, y la calidad de algunos no es la mejor. Pero este es un trabajo que nos muestra a un músico a punto de explotar en el mercado mundial y las conciencias de los pueblos.  (EEG)

 

 

Juaneco y su Combo  “Masters of Chicha, Vol 1”  (Barbes Records)

 

En mi constante andar por buscar nuevos ritmos conectados, por supuesto, a nuestra herencia latina, me encontré con un compacto de nombre Juaneco y su Combo  “Masters of Chicha, Vol 1”. Y es que este nombre, Chicha, ha estado rondando últimamente el ambiente musical. Descrito como una mezcla de una variedad de ritmos, mayormente representado por la cumbia, el huayno (folklore andino), carimbo (del Brasil) y una dosis de rock & roll, Chicha encontró con Juaneco y su Combo, un grupo originario de Pucallpa, en el  Perú Amazónico, uno de sus máximos intérpretes. “Masters of Chicha, Vol 1” es una generosa y candente recopilación del legado musical de este grupo.

 

Los ritmos de Juaneco y su combo son simples – comparados con la complejidad de otras cumbias --, pero mantienen una identidad, basada en un sonido muy pegajoso, proveniente de guitarras, órganos, y percusión en general, incluyendo bongós y timbales, y uno que otro instrumento indígena. La producción consta de 16 temas, todos con el sabor constante de la chicha, comenzando con “Mujer Hilandera”, un número originario del Brasil, convirtiéndose en el primer éxito de Juaneco en el Perú. Otras piezas memorables y favoritas del público en este compacto son, por ejemplo, “Ya se ha muerto mi abuelo” y “Me robaron mi Runamula”.

 

Juaneco y su Combo fue creado por Juan Wong Paredes (saxofonista), y su hijo Juan Wong Popolizio (organista) tomó las riendas luego de un tiempo. El joven Wong, a su vez,  reclutó a Noe Fachin (guitarrista). Cinco miembros del grupo – con excepción del joven Wong -- murieron en un accidente aéreo en 1976.  Mao Wong López, hijo del superviviente Wong (quien no estaba en el avión, pero falleció hace unos años), ha seguido la tradición iniciada por su abuelo, y junto a otras agrupaciones como Chicha Libre, han estado propulsando un renacer de este género musical.  Juaneco y su Combo  “Masters of Chicha, Vol 1” es un documento musical histórico de nuestra querida América Latina.  (EEG)

 

Justo Betancourt  “Lo Sabemos”  (Fania/EMúsica)

 

Justo Betancourt es uno de los pocos cubanos que pertenecieron al sello Fania de manera estelar, y realmente fueron pocos comparado con los otros artistas de la poderosa disquera los éxitos que dejó en su carrera. Aunque las razones de su poca producción son materia de debate, lo cierto es que el hombre tiene talento y sabe cantar. Aunque su más conocido hit pareciera ser “Pa’ Bravo Yo”, es mi opinión que su obra cumbre fue o es el álbum “Lo Sabemos”, un trabajo bien pensado, con buenos arreglos, buen sonido y una orquesta para chuparse los dedos.

 

De la pluma del bien recordado Tite Curet, Betancourt empieza la producción con la poderosa guaracha “Como lo canto Yo” una de mis favoritas, donde el sonero matancero va al grano, brindando una cátedra de cómo cantar salsa.  También de la autoria de Tite Curet, Betancourt nos regala el colorido “De Mí para Puerto Rico” – otra favorita -- pieza que el compositor boricua escribiera para Justo a manera de agradecimiento por el apoyo recibido por el pueblo puertorriqueño.  Otro número que se escuchó mucho cuando este álbum salió originalmente fue el guaguancó “Pedregal”. El compacto cierra energética y festivamente con “Cambia Palo Pa’ Rumba”, donde brilla la trompeta del maestro panameño Víctor Paz, quien realmente es el responsable, en parte, de la vida que suda esta grabación.

 

Es mi opinión que si tuviera que escoger un álbum para recomendar de Justo Betancourt, sin duda alguna sería “Lo Sabemos”. Esta es una producción de calidad que sobrevivirá la dura prueba del tiempo. (EEG)

 

 

Feliz Navidad y recuerde regalar un CD

 

Herencia Latina