Sammy Ayala, El
Caballero de la Plena
Rafael Ithier, Cortijo, Ismael, Kito
Velez, Eddie Perez, Roy Rosario, Sammy Ayala. Miguel Cruz en el bajo, no se ve
en lafoto.
Foto archivo de Jaime Jaramillo.
Con el Combo de Rafael Cortijo
Por: ©Jaime
Jaramillo
jaramij@yahoo.com
Colaborador de Herencia Latina
Las fotos son del archivo de Jaime Jaramillo.
San Juan - Puerto Rico
Este
artículo fue el resultó de una entrevista realizada por Jaime Jaramillo en la
casa de Sammy Ayala ubicada en Río Piedras, Puerto Rico, el día 7 de enero del
año 2001.
Muchos músicos tienen sobrenombres que implican realeza, y sobriedad,
tales son “Duke” (El Duke) Ellington, Pete “El Conde Rodríguez, Celia Cruz “La
Reina Rumba”, Tito Puente “El Rey del Timbal, Tito Rodríguez, Machito y Tito
Puente los “Reyes del Mambo y a otros dada su personalidad cordial, amable y
respetuosa se les llaman “Caballeros”. Así, Gilberto Santarrosa se le apoda “El
Caballero de la Salsa”. Después de entrevistar a Sammy y escuchar su
tranquilidad, respeto a sus compañeros, amabilidad y cortesía se me ocurrió
apodarlo “El Caballero de la Plena” dada su identificación con este tipo de
ritmo autóctono.
Sammy Ayala nace el 17 de febrero de 1933 en la parada 22 de Santurce.
Su padre fue Don Carlos Ayala, quien murió a los 23 años cuando Sammy solo tenía
un mes de nacido. Su madre fue Doña Leonor Román quien junto a su otra hija
Rita, criaron a Sammy. Rita es actualmente una maestra retirada que vive en la
calle Loiza, sector Mayolita.
Desde los doce años, Sammy comenzó a trabajar en una cristalería,
después se desempeñó en otros oficios para ayudar así a su madre y hermana en el
sostenimiento de la familia.
A Sammy siempre le gustó cantar desde muy niño y participaba en
actividades escolares en su primera escuela, La Julián Blanco en la Parada 22 y
en la Labra de la avenida Ponce de León donde ganó un concurso de canto. Para
ese tiempo, estudiaban en la Labra, el actor Braulio Castillo y el político y
músico Nicolás Nogueras y el actor José Julián Álvarez entre otros. De allí
pasó a la Central High, pero no culminó su escuela superior. Recuerda, que de
niño acostumbraba pasearse por la playa donde estaba el Casino de Puerto Rico y
donde hoy se encuentra el Hospital Prebisteriano. También recuerda haber visto
con frecuencia a Roy Rosario, a Cortijo e Ismael participando en las Fiestas de
Cruz y en reuniones de marquesinas que llamaban Bánicas. Durante esa época,
Ismael y Cortijo pertenecían al grupo “Monterrey” de Monchito Muley, quien a la
vez se desempeñaba como sastre.
Al llegar a los 17 años, Sammy se aumentó en un año su edad, para
poder ingresar a l ejército. Fue reclutado en 1951 y salió de su humilde casa
de madera - que hasta ese entonces había sido su hogar - hacia la guerra de
Corea. Cuando regresó de Corea en 1954, su compadre Gilberto Cortijo lo
recomendó con su primo Rafael para cantar en el Combo que se había formado
recientemente. Había necesidad de un cantante que pudiera interpretar canciones
en ingles para los marinos que frecuentaban La Rivera, uno de los primeros
clubes donde Cortijo actuaba con su grupo. El cantante del Combo era Miguel
Clemente, quien más tarde abandona el combo para unirse con al pianista Mario
Román.
Cuando Sammy ingresó al Combo, éste estaba formado por: Miguel Cruz,
bajo; Néstor Torres, piano; Papitín, congas; Cortijo, timbales; Roy Rosario,
cantante de números alegres como guarachas; “Venezuela” o “Carapipi”, trompeta
(este había estado con Arsenio Rodríguez) y Eddie Pérez, saxofón. Al abandonar
el grupo, Papitín es reemplazado por Martín Quiñónez, quien era un músico
veterano y quien fabricaba tumbadoras, vivía en el sector Cubuy de la Parada 21,
de Santurce.
En las tumbadoras: Martin Quiñones y
Rafael Cortijo, trompetas: "Kito" Velez y Mario Cora; Ismael Rivera; en los
coros: Roberto Roena y Sammy Ayala; en el sax y voz falsete: Eddy Perez "La Bala".
Foto archivo de Jaime Jaramillo.
Entre los conjuntos que había en esa época se destacaban; Tommy Muriel
quien fue pianista, su cantante fue “Che” Delgado, quien años más tarde,
cantaría con Cortijo, luego de la era de Ismael Rivera. Mientras estaban en la
Rivera, también disfrutaban de un contrato a tiempo parcial para tocar en el
Morocco; al Morocco le cambiarían el nombre por el “Black Magic” que era
propiedad de Armando Castro (famoso director de orquesta y autor de Jack, Jack,
Cutuguru”). Luego, abandonaron La Rivera y se trasladaron al Morocco, para
tocar de 5 a 6 noches por semana. En ese tiempo actuaban en ese cabaret, Lucy
Fabery. También se escuchaba mucho Johnny Segui con su grupo los Dandies y
Alfaro X.
Después entró al Combo de Cortijo, Rafael Ithier para reemplazar a
Viñolo (conocido como Buñuelo) quien había reemplazado a Néstor Torres. Ithier
era a migo de Cortijo, además de tocar el piano (que había aprendido a tocar con
su hermana mayor Esperancita quien todavía vive), también interpretaba la
guitarra, el bajo, poseía un excelente oído. Ithier tocaba en el conjunto Taoné
de Vitín Santiago, donde estaba como guitarrista Tito “Fa” Henríquez, compositor
(ex - esposo de la cantante Ruth Fernández).
Recomendados por Bobby Capó, quien era la estrella del sello disquero
Seeco de Nueva York y propiedad de Mr. Sydney Siegel, Cortijo realiza con
Ismael su primera grabación en Puerto Rico, en los Estudios Ochoa. Ismael era
uno de los cantantes de la Orquesta Panamericana de “Lito” Peña. Vale la pena
agregar que su primera grabación con esta orquesta fue Cha Cha Chá en Blue”, la
Orquesta actuaba en el Escambrón Beach Club. Cuando Ismael terminaba su trabajo
con esta orquesta, salía a cantar con Cortijo.
Bobby
Capo, Roy Rosario, Sammy Ayala, Ismael Rivera, Ida Claudio, mediados 50's, en la
TV de Puerto Rico. Foto archivo de Jaime Jaramillo.
A la gente de la Seeco le gustó Ismael y le pidieron que fuera el
cantante principal de la grabación en vez de Roy Rosario. También llamaron como
refuerzo al cantante colombiano Nelson Pinedo quien había sido estrella de la
Sonora Matancera. Debemos recordar que ya cortijo era popular aquí en Puerto
Rico por sus presentaciones en la televisión, en el programa “La Taberna India”
y en la radio, además de fiestas patronales, clubes, etc. Pero a nivel
internacional eran desconocidos, por eso la gente del sello Seeco no quisieron
arriesgarse y contrataron a Nelson Pinedo quien cantó (irónicamente) tres
plenas; “Zumbador”, “Lola la Coquetona’. Roy grabó “Conocí a tu papá e Ismael
Rivera cantó los números restantes, entre ellos “Lo dejé llorando”’ composición
de Sammy Ayala.
“Venezuela” había dejado al Combo de Cortijo debido a unos problemas
personales con la cantante Lydia Manzano cuando estaban en el Black Magic” y el
trompetista para esta primera grabación fue el legendario director de orquesta
Miguelito Miranda . Después de esta grabación ingresó “Kito Vélez, quien sería
una gran adición ya que además se convirtió en el arreglista principal.
Como nota curiosa cabe agregar que aproximadamente en el año 1960, el
saxofonista Eddie Pérez y el cantante Ismael Rivera sostuvieron un altercado que
culminó con el abandono del Combo por parte de Eddie Pérez “La bala”. Este fue
reclutado por el grupo de Charlie Miró y sus Pájaros Locos que tocaban en el
“Esquife”. Héctor Santos reemplazó a “La Bala”, pero duró poco ya que la
presencia de Eddie era imprescindible por su falsetto y su excelente saxofón.
Después Eddie e Ismael continuaron su gran amistad y ya el Combo contaba con 2
saxofones y más tarde Mario Cora entraría como segunda trompeta quien también
cantaba algunos boleros.
Sammy piensa que el falsetto de Eddie surgió debido a que a este le
gustaba escuchar e imitar a Graciela, la cantante de Machito.
El grito peculiar que se escucha en algunas de las grabaciones, es de
Sammy y no recuerda como surgió, simplemente que lo empezó a introducir en
ciertas partes de la melodía. Sammy, además, es un excelente ejecutor del güiro
y junto con Roy, “La Bala” e Ismael hacían un excelente coro. La química que
existía entre los miembros del grupo les permitió desarrollar un estilo único y
con los arreglos de “Kito” e intervención en éstos de Cortijo, Ismael e Ithier
produjeron un sonido tal que se han convertido en el grupo más popular de todos
los tiempos, continuando después con el Gran combo, quienes fueron los herederos
de esa tradición implantada por Cortijo.
La forma como se hacían los arreglos consistía en que ‘Kito” recogía
ideas de Maelo, Cortijo, Ithier y también de Miguel Cruz y luego les hacia los
arreglos. Antes de “Kito”, no había arreglos y todo lo hacía de “guataca” como
dice Sammy, quien agrega que: “para tocar montuno no hace falta papel”. Cuando
Cortijo reunió en 1974 a algunos de los músicos que no se habían ido
inicialmente con Ithier y el Gran Combo, produjeron algunas canciones que fueron
un éxito, entre ellas: “Para mi gente”, “Como son las cosas” y “Dios los cría y
ellos se juntan” de autoría de Sammy Ayala.
Las plenas de don Rafael Cepeda, interpretadas por el Combo, surgieron
cuando Maelo y Cortijo, algunas veces acompañados por Martín Quiñones o Sammy,
visitaban a escuchar lo último que éste hubiera compuesto. Aunque Cortijo
tocaba la campana o timbales, en realidad era un gran intérprete de turbadora y
Roy tocando la campana o timbales si era necesario, para la interpretación de
las plenas. Durante las visitas a Don Rafael, éste y Cortijo tocaban las
tumbadoras, Maelo acompañaba cantando la letra e introducía sus propias
inspiraciones. Después se lo llevaban a “Kito” quien hacía los arreglos y así
fue que surgieron “El Bombón de Elena”, “Madame Calalú” y otras plenas famosas.
Otra plena que pegó fue “Las Ingratitudes” compuesta por, Doña Margarita. Maelo
a su vez compuso el famoso “Besitos de Coco”. Cada vez que salía un elepé de
Cortijo al mercado, eran 12 éxitos que se bailaban por igual a diferencia de
muchos otros artistas que sacaban 1 o 2 hits por elepé o el hoy disco compacto.
El Combo incursionó en el cine en la película netamente
puertorriqueña, “Maruja” y en una coproducción Franco-Italiana, “Calyso”,
que se filmó el año de 1958 y donde interpretan 2 o 3 canciones que fueron
filmadas en la playa de Vega Baja y en las calles del Viejo San Juan. Lo
curioso fue que la película nunca llegó a exhibirse en Puerto Rico, mientras en
países como Colombia, Venezuela, Panamá y Perú fue un éxito rotundo. Sammy
contaba que estando de gira en Panamá, alguien les avisó que en un teatro en la
ciudad de Colón estaban presentando la película y todo el Combo fue al teatro a
verla. La Cinemateca Francesa tiene una copia de esta película y el dueño de
los derechos es la distribuidora Rene Chateau en París.
Después que se desbandó el combo, Cortijo formó una nueva agrupación
que participaron en “La criada malcriada” con Tommy Muñiz, José Miguel Agrelot,
Velda González y Yoyo Boing. La parte donde sale el combo de Cortijo, se filmó
en el Hotel Concha, con Cortijo en los timbales; Sammy Ayala, en los güiros y
coros, los cantantes eran Nacho Sanabria, Lesdelia Sanjurjo y Pepito Malengue.
También el combo se reagrupo alrededor del 1974 para una presentación en TV con
el productor Paquito Cordero quien recreó su rol de “reguerote” en la Taberna
India, pero Sammy no estuvo en esta presentación ya que estaba en NY con lo
Cachimbos.
Rafael Cortijo, Ismael Rivera, el empresario
Tony Chiroldes,
Martín Quiñonez, Benny More y Sammy Ayala. Foto cedida por Eddy Zervigón
(Director. Orquesta Broadway)
Otro detalle interesante fue la visita del “Barbaro del Ritmo”, Benny
More, a quien acompañaron en las presentaciones de la televisión, radio y en los
teatros de la Isla. Tuvieron una gran química, pues ambos eran músicos del
pueblo. Benny los apodó La Tribu y según Sammy, Benny More bautizó a
Maelo como “El Sonero Mayor”. Cuando se encontraron en NY, Benny quería
que la “tribu” lo acompañara en sus presentaciones en el “Palladium”y otros
sitios legendarios de la Salsa en NY. Las vistas a NY fueron siempre un éxito
rotundo, allí compartieron tarima con Machito, Tito Puente, Tito Rodríguez, los
hermanos Palmieri, la Sonora Matancera y otros gigantes de la Salsa.
Durante las actuaciones del Benny, éste no llegó a hacer dúo con Maelo
ya que aquel cantaba sus canciones tales como “Castellano, que bueno baila
Usted” que Benny cambiaba a Castellano por Cortijito. Cortijo y Benny se
encontraron en unos carnavales en Panamá cuando estaban con sus
respectivos grupos, y en el hotel donde se hospedaban, formaron tal algarabía
que por poco los botan. ¿Se pueden imaginar cómo sería el encuentro de estos
dos gigantes con sus respectivos grupos en pleno apogeo?
Retomando vivencias juveniles, Sammy recuerda haber visto al
legendario plenero “Bogó” en la parada 21, cantaba tocaba los barriles,
bailaba. Otros pleneros que existían en la época eran: Jesús Cepeda, Toñín
Romero, Canario y Joselito Oppenheimer. Las letras de las plenas narran el
acontecer diario, alegrías y tragedias en lugares como el barrio de San Antón de
Ponce y Santurce en San Juan. El Sr. Pedro Malabet Vega, el alma de la reunión
de los coleccionistas, abogado de renombre y escritor de obras de Derecho Penal
y música, está en el proceso final de publicar la historia definitiva de la
plena. Este documento se convertirá en la Biblia de este autentico ritmo
puertorriqueño.
Sammy recuerda entre otros a Arsenio Rodríguez a quien le unió una
gran amistad, cuando Sammy lo veía, le cantaba al oido su composición: “lo dejé
llorando, lo dejeé. . . ! Y el maestro Arsenio, con su gran oído, le decía: -
“Sammy, ¿qué hay de nuevo?”. También compartió con Daniel Santos en el teatro
Puerto rico en NY, en Panamá y Ecuador. Daniel fue vecino de Sammy cuando tenía
una tienda de discos. El cantante de Moncho Usera, su tocayo Sammy Vélez era
otro amigo de la época en que estuvo en el ejército, en Corea.
Tuvo una grata experiencia con el gran pianista y director de orquesta
Noro Morales, quien en los años 50’s tocaba en el Hotel la concha. Un día Sammy
fue a llevarle un bolero de su propia inspiración al arreglista dominicano
Radamés Reyes Alafau, Noro, que estaba presente buscando otros arreglos le pidió
que le diera el arreglo del bolero “Oh, Dios mío” para que Vitín Aviles lo
cantara y así sucedió. Sammy fue a la Concha, se lo enseñó a Vitín y este lo
cantó ante el público y Sammy que estaba presente se sintió orgulloso y feliz.
El 21 de marzo de 1962 cuando los muchachos del Combo de Cortijo
regresaban de una actuación en Panamá, Melo fue intervenido por agentes de la
aduana en el Aeropuerto de San Juan quienes le confiscaron una sustancia de
abuso.
A los
pocos días Rafael Ithier citó una reunión con los músicos del Combo de Miramar
en casa de Roberto Roena. En esta reunión Ithier sugirió la formación de un
grupo aparte ya que Cortijo había entrado en una etapa de depresión. Así se
inició el Gran Combo. Entre quienes se rehusaron a unirse a Ithier estuvieron
Roena, Mario Cora quien era la segunda trompeta y Sammy quien manifestó que le
unían fuertes lazos de amistad y compadrazgo con Cortijo y Maelo y comentó: “si
yo comí carne y hueso cuando todo estaba bien, yo los acompañaré ahora porque
son mis amigos y compadres.
Cuando le pregunté a Sammy si Ithier en sus tiempos con Cortijo había
dado señas de querer ser el líder contestó: “bueno, éste tenía algunas
ambiciones y a veces comentaba que si él fuera el líder las cosas serían
diferentes ya que notaba que el grupo tenía ciertos problemas y faltaba un poco
de disciplina”.
Sammy no lo mencionó con amargura si no más bien como un hecho real
que indicaba que ya Ithier tenía ideas de irse eventualmente. Su amistad con
Ithier ha continuado y fue el mismo Sammy quien le recomendó a un joven cantante
para el nuevo combo llamado Andy Montañez.
Durante el periodo que cubrió el juicio hasta que Maelo fue
sentenciado a “cumplir su deuda en la sociedad” como decía Sammy muy
caballerosamente, el Combo grabó por última vez con Maelo ya que éste estaba
libre bajo fianza algunos números entre ellos: “Fantasía Sideral”, “A Lo Loco”,
“Fea” y otros más. Esto ocurrió en el año 1962 cuando Maelo fue sentenciado a
cumplir 3 años y medio de cárcel en la prisión federal de Lexington, Kentucky
donde Maelo estuvo activo musicalmente formando un grupo mientras cumplía con
su “deuda”.
Sammy decidió formar un quinteto pero después se fue con un grupo que
formó Cortijo quien tocaba en un sitio llamado “La Calesa” ubicado en la
carretera que conduce a Caguas, donde también actuaba el trompetista cubano
Alejandro”El Negro” Vivar con otro grupo. Esta agrupación de cortijo fue la que
participó en la película “La Criada Malcriada”.
Más adelante, Cortijo amplió el grupo y contrató entre otros a un
saxofón tenor y cuando Ismael terminó su condena se unió al grupo y grabaron un
álbum llamado “Bienvenido” para celebrar el regreso de Maelo y entre otras
canciones interpretaron el éxito “Arrecotín, Arrecotán”.
Sammy se quedó hasta el año 1966 cuando tomó la decisión drástica de
abandonar el grupo. Cuando le pregunte la razón. Sammy tomó una larga pausa,
su rostro mostró un atisbo de nostalgia tal vez con un poco de tristeza y dijo
en tono lento y pausado: “déjame tomarme un traguito de esta cerveza primero y
comenzó diciendo que aunque lo unían fuertes lazos de amistad con su compadre
Cortijo, él albergaba una especie de resentimiento o disgusto ya que “él tenía
deseos de grabar boleros con el Combo pero Cortijo nunca lo complació y aunque
Sammy lo hacía en la radio, TV y en presentaciones personales, lo de grabar
nunca se dio y después al formar el grupo otra vez, Nacho Sanabria, Lisdelia y
Pepito Malengue grabaron pero no así Sammy.
Sammy consultó con su familia y decidió de marino mercante. Fue a la
N.M.U (Nacional Marines Union) en NY donde hizo un curso para “Waiter”. Esta
decisión fue difícil para Sammy ya que tuvo que dejar a su familia, amigos y
también necesitaba un tiempo para pensar y decidir que iba a hacer en un
futuro. Cuando se embarcó tuvo la agradable sorpresa de encontrase a un grupo
de músicos conocidos como: el compositor, director de orquesta y cantante
Marcelino Guerra “Rapindey” y el tresista Luis “Lija” Ortiz (el mismo que
acompañó a Panchito Reset en sus grabaciones), quien poco tiempo después que
Sammy desembarcara, falleció en el barco de un ataque al corazón mientras estaba
en el baño.
Sammy logró viajar a través de Europa y después entró al barco Santa
Sofía viajando por Suramérica y donde logró realizar un sueño que tenía: el de
llegar a Puerto Rico en barco que se dio el día de su cumpleaños, el 17 de
febrero de 1968.
Después consiguió trabajo como “Waiter” en la cafetería del
Metropolitan Museum of Art en Nueva York (MOMA) y estando allí acostumbraba a
frecuentar los clubes nocturnos en NYC donde conoció a Gilberto Cruz quien tenía
un sexteto. Gilberto había sido novio de una hermana de Sammy y también había
estado en la infantería de marina. Gilberto, un ponceño quien tocaba piano, le
ofreció un trabajo para cantar en el grupo los fines de semana.
Con esta agrupación hizo su primera grabación como solista en el album
“Yes, I wil” donde interpreto dos boleros y otros números movidos. Grabaron
para los sellos Tico y Ansonia y después se fue con el grupo del pianista Joe
Acosta con quien grabó algunas de sus composiciones.
Posteriormente se unió con el grupo de su compadre Maelo. Los
Cachimbos donde tocó el güiro e hizo coros pero no era parte integral del grupo
inicial. Después cantó con este grupo boleros tales como: “Franqueza”, “Sabrá
Dios”, “Niña” y “La Hiedra” entre otros.
Sammy recuerda que una vez navegando cerca de Maracaibo logró escuchar
una canción típica venezolana que le llamó la atención: “De Colores”.
Sammy se imaginó esta canción cantada por su compadre y cuando se
integró al grupo permanentemente, Sammy le dio la canción a Maelo quien vivía
en la calle 71 y Broadway en NYC cuando apenas estaba formando el grupo. La
grabaron en el álbum que lleva el nombre de esa canción que fue un éxito
rotundo. Sammy recuerda que ese grupo estaba: Javier Vázquez (hijo del
legendario bajista de la Sonora Matancera “Bubú”, quien hizo arreglos para esta
agrupación con Vicentino Valdés, entre otros “Los aretes de la luna”) en el
piano, y en los arreglos; Juan Rivera en el bajo; Vitín Palacios, bongó; “El
Chino” en las congas; Rijo en los timbales; José Rodríguez, de origen brasilero
en el trombón y Manolín González, el saxofón.
Sammy estuvo con Maelo hasta 1978 y durante ese tiempo hicieron giras
exitosas por Panamá, Venezuela, Perú y Ecuador.
Acerca
del compadrazco con Maelo y Cortijo, Sammy comentó que Maelo le bautizó su hijo
menor y Cortijo a su hija. Gilberto Cortijo (fallecido recientemente), el primo
de Rafael, bautizó el hijo mayor de Sammy y éste a su vez le bautizó un hijo a
Gilberto cumpliendo así una promesa que se había hecho cuando niños.
Rafael Cortijo, Machito, Sammy Ayala,
Ismael Rivera, Roy Rosario y Mario Cora.
Foto archivo de Jaime Jaramillo.
Una anécdota que Sammy recuerda vividamente fue una bronca
espectacular que se armó en el “San Nicholas Arena” situado en Mahanttan en un
día de fuerte invierno cuando cayó una nevada que se presentaban: Cortijo y su
Combo con Maelo, Machito y Graciela, Vicentíco Valdés, La Sonora Matancera.
Hubo peleas a puño limpio, silletazos y al día siguiente el New York Times
reportó en letras grandes: “Riot in a Latin Club”.
Sammy
comentó que la relación de Cortijo con Machito, Tito Puente, Tito Rodríguez,
Vicentino Valdés fue siempre cordial. No hubo celos, cada cual hacía lo suyo y
se respetaban y admiraba mutuamente.
Cuando
le pregunté acerca del racismo éste comentó que aquí se practicaba (y se
practicaba) en forma sutil y comentó que Bobby Capó los ayudó a romper esa
barrera cuando los presentó como espectáculo principal en los Hoteles Normandie
y Hiltón. Comentó que él nunca ha sido sentido complejo de raza ya que “ante
los ojos de Dios, todos somos iguales”.
En
cuanto a la relación de Cortijo con los personajes de la radio, recordó a Luis
Vigoreaux, Mario Artau y Gilberto Mamery quienes fueron factor preponderante en
el éxito que tuvo Cortijo.
Actualmente Sammy está activo y tiene un grupo muy bueno que se llama “Plenariun”
donde canta, hace coros, se identifica con su grito de batalla en presentaciones
personales así como en la televisión. Se le han hecho varios homenajes y
recientemente apareció en un documental sobre el barrio Trastalleres con aquel
jovencito que Sammy le había recomendado a Rafael Ithier para cantar con el
incipiente Gran Combo, el “Niño de Trastalleres” Andy Montañez.
Edición Octubre de
2004